Dina y aquella trágica historia de amor.

Muchos han enseñado a Dina como un mal ejemplo pero ¿Qué esconde esta trágica historia? ¿Por qué está este pasaje en la biblia?



Aunque el templo de Jerusalén forjo una especie de unión entre la tribu de Judá y la de Leví sus historias fueron muy diferentes. Para Judá sería el reino y para Leví el sacerdocio. Mientras en uno se establecería el reino el otro no tendría heredad en Israel.

Esta es la historia del porque los levitas no tendrían heredad en Israel y parte del porque Judá obtendría el reino. Esta es la historia de Dina y Siquem.

Dina era una chica sobre la cual hay en la Biblia un largo relato. Esta historia se narra en el Cap. 34 del Génesis. Obsérvese la avalancha de catástrofes que siguieron como una cadena de equivocaciones cometidas por estos dos jóvenes.

Apenas hubo entrado Dina en la ciudad de Siquem, y había entablado conversación con algunos transeúntes, que el príncipe, hijo del rey Hamor, que se llamaba también Siquem, como la ciudad, la invitó a su palacio. La historia no nos cuenta cuanto Dina consintió o se resistió a los halagos de Siquem; sólo sabemos que éste al final se acostó con ella, lo cual fue considerado una deshonra por los hermanos de Dina. Y que ella se había quedado en el palacio.

Entonces, se nos dice, que el alma de Siquem se apegó a ella y se enamoró de la joven a tal punto que pidió a su padre que se la diera por mujer.

De un modo especial destaca la traición de sus hermanos, que mancillaron el Pacto del Señor al atacar a los habitantes de Siquem, cuando estaban sufriendo el dolor de la circuncisión. La circuncisión era el signo del Pacto. A causa de esto fue destruida toda la ciudad, y Simeón y Leví violaron la justicia porque se llevaron las mujeres y los niños de aquella ciudad como despojos. El resultado fue tal que Jacob consideró que "los moradores de la tierra lo tendrían por abominable", y tuvo que huir de Betel.

“Y salió Dina la hija de Lea, la cual ésta había dado a luz a Jacob, a ver las hijas del país. Y cuando la vio Siquem, hijo de Hamor heveo, príncipe de aquella tierra, la tomó, y se acostó con ella, y la deshonró. Y su alma se apegó a Dina la hija de Lea, y se enamoró de la doncella, y habló al corazón de la doncella.

Y habló Siquem a Hamor su padre, diciendo: Tómame por esposa a esta doncella.

Y oyó Jacob que Siquem había amancillado a Dina su hija: y estando sus hijos con su ganado en el campo, calló Jacob hasta que ellos viniesen. Y se dirigió Hamor padre de Siquem a Jacob, para hablar con él. Y los hijos de Jacob vinieron del campo cuando lo supieron; y se entristecieron los varones, y se llenaron de ira, porque hizo vileza en Israel acostándose con la hija de Jacob, lo que no se debía haber hecho. Y Hamor habló con ellos, diciendo: El alma de mi hijo Siquem se ha apegado a vuestra hija; os ruego que se la deis por esposa. Y emparentad con nosotros; dadnos vuestras hijas, y tomad vosotros las nuestras. Y habitad con nosotros; porque la tierra estará delante de vosotros; morad y negociad en ella, y tomad en ella posesión.

Siquem también dijo al padre y a los hermanos de ella: Halle yo gracia en vuestros ojos, y daré lo que me dijereis. Aumentad a cargo mío mucha dote y dones, que yo daré cuanto me dijereis, y dadme a la doncella por esposa.

Y respondieron los hijos de Jacob a Siquem y a Hamor su padre con palabras engañosas, por cuanto él había amancillado a Dina su hermana. Y les dijeron: No podemos hacer esto de dar nuestra hermana a hombre incircunciso; porque entre nosotros es una afrenta. Mas con esta condición consentiremos con vosotros: Si habéis de ser como nosotros, que se circuncide todo varón de entre vosotros. Entonces os daremos nuestras hijas, y nosotros tomaremos las vuestras; y habitaremos con vosotros, y seremos un solo pueblo. Pero si no nos prestáis oído para circuncidaros, entonces tomaremos a nuestra hija y nos iremos.

Y parecieron bien sus palabras a Hamor y a Siquem, hijo de Hamor. Y no tardó el joven en hacer aquello, porque la hija de Jacob le había agradado; y él era el más honorable de toda la casa de su padre.

Entonces Hamor y Siquem su hijo vinieron a la puerta de su ciudad, y hablaron a los varones de su ciudad, diciendo: Estos varones son pacíficos con nosotros, y habitarán en el país, y negociarán en él; pues he aquí la tierra es bastante ancha para ellos; nosotros tomaremos sus hijas por esposas, y les daremos las nuestras. Mas con una condición consentirán estos hombres en habitar con nosotros, para que seamos un pueblo; si se circuncida en nosotros todo varón, así como ellos son circuncidados. Sus ganados, sus bienes y todas sus bestias serán nuestros; solamente convengamos con ellos, y habitarán con nosotros. Y obedecieron a Hamor y a Siquem su hijo todos los que salían por la puerta de la ciudad, y circuncidaron a todo varón, a cuantos salían por la puerta de su ciudad.

Y sucedió que al tercer día, cuando sentían ellos el mayor dolor, los dos hijos de Jacob, Simeón y Leví, hermanos de Dina, tomaron cada uno su espada, y vinieron contra la ciudad osadamente, y mataron a todo varón. Y a Hamor y a Siquem su hijo los mataron a filo de espada: y tomaron a Dina de casa de Siquem, y salieron. Y los hijos de Jacob vinieron a los muertos y saquearon la ciudad; por cuanto habían amancillado a su hermana. Tomaron sus ovejas y vacas y sus asnos, y lo que había en la ciudad y en el campo, y todos sus bienes; se llevaron cautivos a todos sus niños y sus esposas, y saquearon todo lo que había en casa. Entonces dijo Jacob a Simeón y a Leví: Me habéis turbado con hacerme abominable a los moradores de esta tierra, el cananeo y el ferezeo; y teniendo yo pocos hombres, se juntarán contra mí, y me herirán, y seré destruido yo y mi casa. Y ellos respondieron ¿Había él de tratar a nuestra hermana como a una ramera?
Y dijo Dios a Jacob: Levántate, sube a Betel, y quédate allí; y haz allí un altar a Dios, que te apareció cuando huías de tu hermano Esaú.



Entonces Jacob dijo a su familia y a todos los que con él estaban: Quitad los dioses ajenos que hay entre vosotros, y limpiaos, y mudad vuestras vestiduras. Y levantémonos, y subamos a Betel; y haré allí altar al Dios que me respondió en el día de mi angustia, y ha sido conmigo en el camino que he andado”. Genesis capítulos 34 y 35

Jacob “El que toma por el calcañal”, que siempre había actuado con prudencia y astucia ya no podría hacer la paz con estos pueblos a su estilo. Luego de aquel acontecimiento su nombre seria cambiado. Ahora se llamaría Israel “Aquel que lucha con Dios”.

Cerca de su final, al momento de bendecir a sus hijos, Israel mostró lo triste que le había resultado aquel acontecimiento que dejó sin heredad a sus dos hijos.

“Rubén, tú eres mi primogénito, mi fortaleza, y el principio de mi vigor; principal en dignidad, principal en poder. Inestable como las aguas, no serás el principal; por cuanto subiste al lecho de tu padre: Entonces te envileciste, subiendo a mi estrado.
Simeón y Leví son hermanos: Instrumentos de crueldad hay en sus habitaciones. En su secreto no entre mi alma, ni mi honra se junte en su compañía; que en su furor mataron varón, y en su voluntad arrancaron muro. Maldito su furor, que fue fiero; y su ira, que fue dura: Yo los apartaré en Jacob, y los esparciré en Israel.
Judá, te alabarán tus hermanos: Tu mano en la cerviz de tus enemigos: Los hijos de tu padre se inclinarán a ti. Cachorro de león es Judá: De la presa subiste, hijo mío: Se encorvó, se echó como león, así como león viejo; ¿quién lo despertará? No será quitado el cetro de Judá, ni el legislador de entre sus pies, hasta que venga Silo; y a él se congregarán los pueblos. Atando a la vid su pollino, y a la cepa el hijo de su asna, lavó en el vino su vestidura, y en la sangre de uvas su manto: Sus ojos rojos del vino, y los dientes blancos de la leche”. Genesis 49:3-12

Luego Rubén el primogénito durmió con Bilha la concubina de Israel perdiendo así la bendición (Génesis 35:22). Pero sus sucesores Simeón y Leví no tendrían heredad por lo tanto el siguiente en la descendencia seria Judá.

Sí, esta triste e injustificadamente violenta historia de amor cambiaría la historia de Israel para siempre.

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Comentarios

  1. breve, conciso y muy facil de comprender! Gracias me sirvio de mucho!

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  2. Y que futuro tuvo Dina?. Suponemos q siguió con su padre y hermanos, pero cómo fue su vida posterior?

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  3. Yo creo que Dina también se enamoró, realmente dudo que fuera una violacion como tal, no creo que ella quisiera Muerto a Siquem, dudo que aya tenido una mejor vida después que Siquem murió, ella pudo ser una Reina, pudo se feliz, por lo menos vivir bien, recordando que antes los matrimonios eran arreglados rara mujer se casaba por amor

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